Píldora IA 1 - ¿Qué es realmente la Inteligencia Artificial? Desmontando mitos y conceptos básicos

La Inteligencia Artificial (IA) ya no es una promesa del futuro: es una realidad que forma parte de nuestro presente. La usamos todos los días y está por todas partes, pero ¿sabemos realmente qué es y cómo funciona? En este post queremos aclararlo de manera sencilla, para que puedas entender qué hay detrás de esta tecnología y cómo puedes beneficiarte directamente. Este es el comienzo de una serie de píldoras en el que trataremos diversos aspectos de la IA. 

Para comenzar a desmitificarla, a menudo se habla de la IA con cierta desconfianza, como si su desarrollo implicara reemplazar el trabajo humano o poner en riesgo la privacidad. Pero el propósito real de esta tecnología es justo el contrario: ayudar a las personas a tomar mejores decisiones y ahorrar tiempo, dejando las tareas más importantes al humano. La clave está en cómo se diseña y en el uso responsable de los datos. 

En esencia, la IA tiene que resolver un problema. Para ello, se usan datos de ese problema y mediante matemáticas se saca una fórmula que lo resuelve. A partir de ahí, si surge el mismo problema solo tienes que introducir los datos de tu situación y el programa lo resuelve aplicando la fórmula. Según los datos con los que se ha entrenado y la fórmula que se ha usado, la respuesta al problema será mejor o peor. A continuación, vamos a poner un ejemplo de cómo funcionaría en la práctica y sus ventajas. 

Un ejemplo sencillo es el filtro de spam que aplican los correos electrónicos. A nuestra bandeja de correo electrónico solo queremos que nos llegue los correos importantes y que la publicidad no la muestre. Sin ninguna herramienta, la bandeja te mostraría todos los correos que has recibido y tendrías que ser tú el que debe organizarlos. Un paso más allá podría ser el contratar a una persona para que hiciera este trabajo, pero resultaría muy costoso además de otros inconvenientes como la privacidad. Por ello, hasta ahora se usaban filtros para poder cribar de forma automática los correos, detectándolos por quien lo envía o por el contenido. Con esta mejora puedes quitar muchos correos a un coste bajo, pero corres el riesgo de perder algún correo importante o que se cuele publicidad, además del mantenimiento para mantener el filtro actualizado. 

Con la introducción de la IA, este problema tiene una mejor solución. Recopilamos todos los correos electrónicos que nos han llegado y los clasificamos entre los que consideramos importantes y los que son spam. Después los introducimos a la IA para que aprenda como hemos hecho esa selección y construya la fórmula. La máquina no es consciente de lo que ha seleccionado y para sistemas complejos incluso un humano no puede saber cómo hace ese cribado. Aun así, con los controles adecuados no debería suponer un gran inconveniente. Una vez terminado el entrenamiento, la próxima vez que recibas un correo, la IA es capaz de clasificarlo y meterlo en la bandeja de entrada o en spam.  

Bajo esta premisa funciona la IA, desde el reconocimiento de imágenes para detectar una manzana o una silla, u ofrecerte que artículos te pueden interesar en base a lo que has añadido a la cesta, sigue el mismo ejemplo que el filtro de spam. Puede que en algunos casos el planteamiento del problema sea algo diferente pero siempre se van a seguir los pasos del ejemplo anterior. En el caso de los LLM (Grandes Modelos de Lenguaje) o chatbots como ChatGPT, el proceso es más complejo, pero se basa en el mismo principio: problema, entrenamiento y resultado, que mediante un algoritmo que ofrece la respuesta más probable. 

Esperamos que este ejemplo te haya servido para entender cómo funciona esta tecnología, sabemos que aún queda mucho por contar, así que poco a poco iremos sacando nuevas píldoras con más contenido. La próxima píldora explicará los usos de la IA y aplicaciones que están basadas en IA, muchas de ellas las conocerás, pero puede que algunas te sorprendan.  Nos vemos pronto.